Durante prácticamente todo el verano hemos continuado con nuestras actividades habituales, a excepción de unos días de vacaciones, aunque hay algunos afortunados que las han alargado un poco más.
Como siempre nuestras terapias individuales y grupales, y las actividades que realizamos en apoyo escolar y con nuestros asistentes personales, además de musicoterapia y las salidas fuera del centro, que sobre todo en esta época de buen tiempo nos encantan.
Pero ya ha regresado septiembre, el otoño y vamos a comenzar el cuarto curso con nuestro Campamento Urbano, este proyecto nacido por la necesidad de algunos de nuestros socios, que en ese momento debían abandonar el colegio de educación especial, y para los que las opciones existentes en Segovia, no tenían la suficiente “calidad” (en relación con aquellas personas que no disponían de autonomía) para participar en talleres.
Hasta ahora este ilusionante e inicial proyecto ha satisfecho las necesidades que los usuarios de nuestra asociación precisaban, pero se prevé que no será así en el corto/medio plazo, motivo por el cual desde la Junta Directiva nos hallamos inmersos en transformarlo en un Centro de Día.