Área de fisioterapia
¡STOP MOCOS!
Durante el invierno y comienzo de la primavera, gran cantidad de enfermedades respiratoria de diferente etiología nos atacan. Su rápida identificación y tratamiento es fundamental para una pronta recuperación, pero muchas de ellas dejan como recuerdo mocos o secreciones que se acumulan y favorecen la aparición de microbios, infecciones e inflamación.
La rehabilitación respiratoria tiene como objetivo facilitar la eliminación de esas secreciones traqueo-bronquiales y mejorar la ventilación pulmonar, por lo que hoy desde el área de fisioterapia os ofrecemos una serie de consejos para el manejo en casa de los indeseables mocos.
Medidas preventivas:
– Cuidar el entorno del hogar, manteniendo una buena ventilación y una temperatura de entre 18º y 20º C.
– Fomentar la buena higiene de manos, sobre todo antes de comer, después de jugar y cuando llegue de la calle.
– Evitar el uso común de juguetes y utensilios de comida.
– Recordar a niños y adultos que al estornudar será mejor tapar la boca y nariz ocupando el codo y no las manos.
– Usar pañuelo o papel higiénico para sonarse y desecharlo tras su uso, no guardarlo en los bolsillos.
– Si se encuentra en riesgo de infección evitar acudir a lugares cerrados donde haya aglomeraciones, como cines, centros comerciales, etc.
– Pedir a las personas enfermas que eviten hacer visitas y viceversa. Si usted o su hijo se encuentra enfermo evite el contacto con personas susceptibles, podría poner en riesgo la salud y hasta la vida de otro paciente.
Cuándo aparecen los primeros síntomas y signos:
Es fundamental diferenciar si la infección es bacteriana o viral. El primer signo de alerta es la fiebre, además de dificultad respiratoria o dolor de oídos. Cuando tengáis sospecha de infección bacteriana por presencia de alguno de los signos anteriores vaya al médico y no use la automedicación, hay muchos tipos de antibióticos y no todos sirven para la misma función.
Realizar lavados nasales con suero fisiológico. De esta manera evitamos que la mucosidad prolifere y ocasione problemas respiratorios más graves.
¿Qué hacer con los mocos?
Además de los lavados nasales, mucolíticos y expectorantes que puede prescribir el médico, podemos aplicar métodos de fisioterapia respiratoria para facilitar la expulsión de las secreciones. Asegúrese de aprender de su fisioterapeuta cómo llevar a cabo estas medidas de la forma más adecuada.
1.- Realizar drenaje postural: Consiste en colocar al paciente en diferentes posiciones según la zona del pulmón que se quiera drenar, así se consigue que las secreciones se movilicen por acción de la gravedad hacia los bronquios mayores y la tráquea. Incluye las posiciones de decúbito lateral, supino y prono con y sin inclinación de la superficie. Cada posición debe mantenerse unos cinco minutos. No realizar después de comer, se debe esperar a que termine la digestión.
2.- Acompañar con percusión y vibración el drenaje postural. La percusión supone dar palmadas rítmicas con la mano hueca sobre la caja torácica para despegar las secreciones espesas adheridas a la pared del bronquio. La vibración consiste en comprimir intermitentemente la pared torácica durante la espiración, lo que aumenta la velocidad del aire expulsado y ayuda a despegar las secreciones. Los terapeutas solemos realizar la técnica con la vibración de nuestra propia mano, aunque también se pueden utilizar aparatos vibradores.
3.- Toser: tras mover la mucosidad desde los bronquios hasta la tráquea debemos llevarla hasta el exterior, y la mejor forma es la tos. En sedestación, con la cabeza un poco inclinada hacia delante se realizan varias inspiraciones profundas por la nariz seguidas de espiraciones bruscas por la boca, lo que estimulará el reflejo de la tos. En los casos en los que los que es imposible toser de forma voluntaria existen dos opciones. Una de ellas será provocar la tos realizando una pequeña presión en la tráquea para desencadenar el reflejo tusígeno. La otra opción será eliminarlas de forma artificial empleando un aspirador.
Esperamos que estos consejos os sean de utilidad y recordad, antes de ponerlos en práctica consultad con vuestro fisioterapeuta.